17 de agosto de 1991
Entrevista de Robert Whelan
Pregunta: ¿Sensei, a qué se refiere cuando afirma que hay una descoordinación entre el entrenamiento físico y las ideas filosóficas del aikido?
Sensei: La filosofía, el “pensamiento” que quiere la gente pertenece a otra dimensión.
Pregunta: ¿Les distrae la idea de que el aikido pretende supuestamente buscar el “amor” y se olvidan del aspecto del Budo?
Sensei: Esto ocurre si se centran únicamente en la parte filosófica.
Pregunta: ¿Que aconsejaría a los alumnos para evitar cometer ese error?
Sensei: Tienen encontrar un término medio. Deberían practicar diariamente. De ese modo, podrán establecer una conexión entre ambos aspectos. La práctica cotidiana es muy importante. Hay que practicar físicamente para ser capaz de establecer la conexión.
Pregunta: ¿De manera que si el alumno asume el compromiso de la práctica cotidiana y se sumerge en el aspecto físico, la filosofía se hará aparente con el tiempo? ¿Practicando de forma sincera, el resto aparecerá automáticamente?
Sensei: La vertiente filosófica no se desarrolla de inmediato. Todos la desean, todos se esfuerzan para desarrollarla, pero obvian otro elemento fundamental.
Pregunta: Sensei, puede que sea gracias a su bagaje cultural que entiende ese compromiso necesario. ¿Cree que los americanos, quienes tienen otra cultura, entienden y son capaces de asumir el compromiso?
Sensei: Pienso que sí. No sé qué lleva a los americanos a frecuentar el dojo… de algún modo, creen que es “beneficioso”. Dada esta actitud, creo que los americanos son bastante listos y singulares. Los alumnos de aikido me parecen muy inteligentes. Todo eso me lleva diariamente a tener esperanza en este país.
Pregunta: Usted también ha dicho que, aunque la harmonía debe existir, la filosofía puede desviarnos fácilmente de la práctica del aikido Budo, con lo que se sacrifica la parte más ardua. Además afirma que el término “Budo” está compuesto por dos caracteres, uno de los cuales significa “aguantar la lanza”. Luego dice que “el aikido empieza precisamente en ese punto: aguantando la lanza hasta empezar a temblar”. ¿Podría precisarlo?
Sensei: De acuerdo… esto no solo es válido para el aikido sino para cualquier arte marcial. Al principio, una persona fuerte protege a un grupo… de gente apacible. Si un enemigo intenta destruir esa paz, (tu) tienes que defenderla. Es el comienzo, el principio del budo. Sin ese “afrontar al enemigo”, sin esa actitud, nunca podremos obtener la esencia del aikido u otro budo.
Pregunta: ¿Cree que ese “afrontar” de que habla mejoraría si los ukes realizasen ataques mejores y más creíbles?
Sensei: Así es. De hecho existe una problemática en la relación nage-uke. Una especie de acuerdo tácito y recíproco entre ambos en el que uno no hará daño al otro. En cierto modo, esta situación, que representa un aspecto muy importante del aikido, puede suscitar una cierta pereza en los alumnos.
Pregunta: Entonces, la cooperación entre nage y uke, que garantiza la seguridad en la práctica, se ha convertido en un problema. ¿Quiere decir que al ser conscientes de ello, los practicantes se vuelven perezosos y no consagran energía suficiente a la práctica?
Sensei: Exacto. Por decirlo de otro modo, se aprovechan el uno del otro. Idealmente el uke debería ser capaz reaccionar con cualquier ukemi a las acciones del nage. Sólo así serán capaces de progresar.
Pregunta: ¿Por lo tanto, si se practican los ukemi para aumentar la seguridad de las caídas y el uke es capaz de protegerse ante cualquier acción del nage, la fuerza y la sinceridad de los ataques mejorará?
Sensei: Así de simple. Y podrán crecer juntos como aikidocas. Desafortunadamente, ahora ocurre lo contrario.
Pregunta: También ha hablado alguna vez del concepto de shiseikan, la noción de la vida y la muerte, y del hecho que tenemos que abordarla si pretendemos practicar y entrenar con entendimiento. ¿Podría el entrenamiento llegar a ser tan agotador que nos llevase de algún modo a esa experiencia?
Sensei: Esa es una pregunta peligrosa cuya respuesta puede acarrear malentendidos. No sé hasta qué punto sería sensato responderla. Solamente diré que en cualquier la actividad, ante una situación de esa índole, cada cual puede sacar sus propias conclusiones si reflexiona sobre ello.
Pregunta: Sensei, también ha afirmado que el shiseikan hace a la gente consciente de la “solemnidad, la rigurosidad y la dignidad de las relaciones interpersonales.” ¿Qué añadiría respecto a la demostración de respeto por parte de los alumnos de aikido?
Sensei: Esta es otra cuestión espinosa. Constantemente acuden alumnos nuevos al dojo. A menudo damos por hecho que conocen las normas de respeto, pero en realidad no es así. Si no se las explicamos, corremos el riesgo de descuidar la etiqueta en el dojo.
Pregunta: ¿Es una responsabilidad de los alumnos más veteranos?
Sensei: La experiencia me dice que es mi responsabilidad. Si mis alumnos más antiguos no lo explican, evidentemente debemos hacerlo nosotros y así reaparece la etiqueta. Estos vaivenes de la etiqueta ocurren a menudo.
Pregunta: También se refiere al amor del budoka que proviene del entrenamiento duro. De la seguridad que proporciona ese amor. ¿Cuáles son sus ideas referentes al amor, la paz y la harmonía que provienen del entrenamiento concienzudo?
Sensei: Sí, si la gente comprende cómo… sabe… son capaces de reflexionar sobre sus vidas… si son capaces de pensar en eso y se centran en lo que es verdaderamente importante en sus vidas… si su vida es importante entonces la vida de otra persona también lo será. Si pensamos superficialmente y vamos a lo fácil, no obtendremos más que palabras. Usted dice “amor”, pero nadie puede probarlo. No podemos probar el amor si no hemos abordado la cuestión con profundidad. Creo que sólo alguien que haya reflexionado sobre cuán importante es la vida… entiende… alguien que haya abordado la situación de la vida y la muerte, solamente una persona así es capaz de probarlo.
Pregunta: Por lo tanto, cuando una persona se toma seriamente la vida y afronta esta pregunta está en condiciones de obtener la buena respuesta. ¿Cuándo dicen “amor” son conscientes del compromiso que asumen y en consecuencia son dignos de confianza?
Sensei: Sí, pero normalmente la gente se queda en la superficie de palabras… que suenan bien… agradables… pero que no prueban nada. Normalmente la gente no tiene los recursos.
Pregunta: Usted afirma que el budo es “el control realmente eficaz del compañero o el adversario”. ¿Qué papel juega la “suavidad” en la ejecución de la técnica? ¿Cómo combinamos “harmonía” y “efectividad”?
Sensei: La fuerza, la dureza y la rapidez no son los únicos elementos importantes de una técnica; son solo aspectos de la técnica. Ejecutar una técnica basándose solamente en estos elementos es hacerlo de forma incompleta. Cada aspecto contribuye a la “correcta” ejecución de la técnica. Si lo importante es la corrección, la técnica debe incluir todos los aspectos. Así pues, la técnica debería ser ni demasiado dura, ni demasiado rápida ni demasiado rígida, ya que la “harmonía” también forma parte del aikido. Lo verdaderamente importante y correcto es la inclusión de todos los aspectos.
Pregunta: A partir de las filmaciones existentes, se habla de las diferencias en la práctica de O Sensei a lo largo de su vida. ¿En su opinión, hay una etapa más importante que las otras o deberían considerarse en su conjunto y practicar algunas veces “duramente” y otras “suavemente”?
Sensei: No conocí a O Sensei en sus años de juventud. Pero O Sensei decía a los jóvenes “entrenad duramente”. Hay que entrenar diariamente, con determinación, para lograr técnicas efectivas. Esto es lo que nos transmitió O Sensei. De todas formas, cuando conocí a O Sensei, él ya era anciano y su técnica era muy suave. La gente tiende a asociar “suave” con “fácil”. Si pensamos en estos términos, nunca comprenderemos lo que hacía O Sensei. Nunca percibí O Sensei como “frágil” o “débil”… Siempre fuerte. De hecho, cuando yo era su uke, a menudo acababa proyectado fuera del tatami. La gente no conoce esto. Ciertas personas de pensamiento uniforme están deteriorando el aikido… lo están destruyendo.
Pregunta: ¡Entonces usted sí que experimentó su fuerza! Los movimientos de O Sensei eran tan gráciles que aquellos que lo observaban concluían que “no había fuerza”. ¿Es adoptando esta perspectiva que destruyen el aikido?
Sensei: ¡Sí! Se dejan engañar por lo que ven. Se les escapa una parte importante. Deberían esforzarse en ver todos los aspectos.
Pregunta: ¿Cree que debe adaptarse la práctica en función de la edad de cada uno? ¿Debe una persona de mayor edad practicar de manera más “suave” para no lesionarse y que alguien más joven debe ejercitarse con vigor?
Sensei: Sí, pero me gustaría que los jóvenes asumieran un mayor compromiso al entrenarse.
Pregunta: ¿Qué consejo daría a aquellos que deseen entrenar de esa forma?
Sensei: Les diría que deben pasar por ello… Me gustaría que los jóvenes (que están confusos) reflexionaran sobre ello y un día hallaran la respuesta.
Pregunta: ¿Entonces es mejor que se debatan por sí mismos?
Sensei: Sí, este aspecto es muy importante.
Pregunta: Eso interesante porque, por lo que dice, si les deja debatirse solos, en realidad les está ayudando. Sin embargo, en mi propia práctica, a menudo he pensado “¿Por qué no me dice alguien lo que tengo que hacer?”
Sensei: Sí, este es el problema del “buen líder”. Si seguimos al “buen líder”, pronto adquiriremos la técnica, es decir un mejor movimiento, pero no necesariamente la esencia. Hay que hacer crecer esto. Sin ir al fondo de la cuestión, sin debatirse, sin sufrimiento, nunca llegaremos a la esencia.
Pregunta: ¿Entonces, podríamos afirmar que alguien con un líder que le enseñe los movimientos rápidamente progresará más deprisa al principio, pero después su progreso se estancará, mientras que alguien a quien le cueste más al principio, mejorará posteriormente?
Sensei: Crecerá interiormente.
Pregunta: ¿Se refiere a esto cuando dice «pon “todo el yo” en el entrenamiento y empieza a ver a través de la práctica»? ¿Cuándo te comprometes completamente es cuando aprendes?
Sensei: Sí, pero actualmente… lo que percibo es que… todo el mundo busca… divertirse. Y después vienen las decepciones. Está bien divertirse, todos juntos, todos contentos, pero esto no basta. No se obtiene nada.
Pregunta: ¿Sensei, usted ha mencionado que en su opinión la gente aporta demasiadas ideas y personalidad al aikido?
Sensei: Demasiado pronto, sí. Es “su” aikido en vez de AIKIDO (risas). Eso también ocurre, sí.
Pregunta: ¿Podría esto corresponderse a la idea de que no se puede llenar un recipiente que ya está lleno? ¿Deberían los alumnos empezar vacíos?
Sensei: Sí, pero puesto que cada persona posee su propio carácter y una educación, ¿cómo inculcar esa idea? En primer lugar, hay que saber que el “Aikido” no tiene nada que ver con “mi” aikido. En última instancia, si uno es capaz de entender el aikido (tras) haber sacrificado el “yo” y estudiar qué significa realmente el aikido, lo que O-Sensei nos enseñó (entonces quizás).
Pregunta: ¿Así pues, antes de empezar a preguntarse sobre el aikido, o sobre tal o cual técnica, deberíamos practicar simplemente y, entonces, con el tiempo, quizás llegaríamos a entender que significa el aikido?
Sensei: ¡Exacto! De ese modo llegaremos a entenderlo. Poco importaría (cuál era) nuestro carácter antes de empezar a practicar aikido.
Pregunta: ¿Cuál debe ser la actitud y las obligaciones de un “alumno sincero”? ¿Cómo debería de actuar?
Sensei: ¿Qué significa un alumno sincero? Como en todo, tiene que producirse una reflexión profunda. No se trata de seguir simplemente lo que hacen los otros… o lo que yo haga. Uno debe reflexionar. Luego si uno percibe… esa idea de “sufrimiento”… o trata de captar la esencia, si se siente eso, entonces, para mí, ese alumno es completamente sincero. Así es como lo siento.
Pregunta: ¿No va a interferir demasiada reflexión en el camino del Aikido?
Sensei: Bueno, de alguna forma, hay que tratar de entrenar. Pero sin reflexión, nada puede acontecer. Puede dar la sensación de que se está haciendo algo, pero creo que en realidad es una pérdida de tiempo.
Pregunta: ¿Luego existen dos errores potenciales: el de la persona que observa y piensa pero no hace nada, y el de la persona que se limita a copiar pero no reflexiona sobre lo que hace?
Sensei: Sí, ambas formas son una pérdida de tiempo.
Pregunta: ¿Qué sugerencias se le ocurren para los alumnos de aikido como grupo? ¿Qué consejo les daría?
Sensei: ¿Cómo grupo? Ya he dicho que hay que asistir a muchos seminarios. Eso significa una mayor interacción con otros grupos de alumnos. En ese aspecto, la comunicación es esencial. Si ello, no se puede crecer en la buena dirección. Es sumamente fácil adquirir malos hábitos si permanecemos en un solo lugar. Por lo tanto hay que ver más, abrir bien los ojos.
Pregunta: ¿En ese sentido, cuando ha hablado de combinar el principio filosófico con el entrenamiento físico, usted ha sugerido que quizás deberían de celebrarse seminarios específicos con ese propósito… se le ocurre alguna reflexión nueva al respecto?
Sensei: Sí, por supuesto, no paramos de pensar en ello. Necesitamos seminarios para alumnos principiantes, intermediarios y avanzados. Pero a menudo, no podemos separar (estos grupos) porque (habitualmente) sólo disponemos de un día. Es demasiado poco tiempo. Así que tenemos que incluirlo todo. Este es un problema habitual. Pero pienso que necesitamos seminarios para debutantes, para alumnos avanzados, para instructores, y seminarios para exámenes. Intentamos hacerlo, pero es muy difícil. Porqué si hacemos un seminario para exámenes hay que excluir a muchas personas. Idealmente, deberíamos realizar cambios, pero también tendríamos que disponer de más tiempo. Creo que es necesario, que debemos hacerlo.
Pregunta: ¿Cree que se celebran suficientes seminarios?
Sensei: Nosotros celebramos uno anualmente. También está Portland ME y, por supuesto, Keene NH celebra seminarios igualmente. Luego están Nueva York, Siracusa y Northampton en Massachusetts… Creo que los alumnos tienen oportunidad de asistir a seminarios cercanos… unos diez al año. Algunos, por ejemplo, pueden asistir a veinte seminarios por año. Son casos excepcionales. Se trata de personas que viven en regiones afortunadas. Para poder obtener un nuevo dan hay que asistir a un mínimo de dos seminarios al año, aunque es posible incluso ir a diez.
Pregunta: ¿Qué podrían hacer los otros dojo para ayudar? ¿Ayudaría el hecho de que cada dojo organizara un seminario al año?
Sensei: Si ocurriera esto, la dificultad radicaría en qué los Shihan pudieran acudir (a todos). Resultaría de mayor (ayuda) si algunos dojos se juntaran para celebrar seminarios.